Lilian Baylis Studio

Los Voluble

Flamenco is not a crime

Conversaciones sobre apropiacionismo cultural, la pureza o no del flamenco, lo flamenco como fiesta o el hedonismo de la electrónica, también habitando en su propios conceptos de pureza, son temas intercalados en la actualidad musical, y que al mismo tiempo, parecen no dejar ver a esos otros géneros ajenos en espacios temporales, intereses y liturgias, como el Dembow, el Gqom o la multitud de nuevos sonidos y tendencias, aún por nombrar, que muchos se empeñan en etiquetar, a groso modo, como trap o música urbana, pero donde habitan sonidos electrónicos, tribales, folklóricos y efectos múltiples pasados por el tamiz de la tecnología. Entre estos dos mundos multiculturales y expansivos habitan Los Voluble y así lo demuestran con el directo de “Flamenco is not a crime”.

Poner en relación el movimiento free party is not a crime aparecido en Europa para defender el derecho al uso del espacio público, la fiesta y la rave, con el flamenco y sus actitudes es una de las líneas troncales de esta propuesta. Un punto de partida que se termina convirtiendo en un directo contundente en el que generan un espacio de relación directa entre dos mundos a priori distantes. Juegos de palabras, interacciones imposibles y cierto espíritu punk y divertido terminan de dar forma a la propuesta de Los Voluble un espectáculo visual que aúna la remezcla irreverente con el eclecticismo de sus referencias.

Los Voluble

Pedro y Benito Jiménez llevan más de dos décadas enredando con la remezcla: el live cinema, el folclore digital o el political remix video. Tanto en propuestas más personales como ‘Borderhack’, entorno a la migración y las fronteras, o ‘No Media Detected’, acerca de los medios de comunicación; como en espacios más colectivos, su continua colaboración con bulos.net (Santi Barber y Raúl Cantizano) en proyectos como ‘Carta Flamenca a Nam June Paik’ , ‘Turismo sin fin’ o ‘DEF, DiálogosElectroFlamencos’, sus conocidos trabajos junto a Niño de Elche en ‘Raverdial’ y ‘En el Nombre de’; su presencia en la Bienal de Flamenco de Sevilla con ‘Cartuja a Rás’ o sus colaboraciones con Rocío Márquez y Manuel León Moreno en ‘La Costilla de Rocío’ dan cuenta de su versatilidad y gusto por la investigación y experimentación sonora, audiovisual y conceptual.